
Nunca me ha gustado Stanley Kubrick. No soporto La Naranja Mecánica y nunca he conseguido terminar 2001: Una odisea del espacio. Es cierto que El resplandor o Senderos de gloria me parecieron pasable, pero sin llegarme a convencerme. En cambio, Eyes Wide Shut me impresionó más. Según leía en Internet, la historia gira en torno a una sencilla pregunta, ¿qué pasaría si nos dejáramos llevar por nuestros deseos?. De esa manera el protagonista de la película es arrastrado por esa pasión a un mundo de sexo y ocultismo motivado por el deseo de venganza antes la infidelidad no consumada de su mujer, olvidando lo más importante, el propio desmoronamiento de su matrimonio.
He elegido la canción que más se ha dado a conocer de la banda sonora titulada Backwards Priests (más tarde rebautizada como Masked Ball, nombre por el que es más conocida) de la compositora Jocelyn Pook. Según la wikipedia, Pook se basó en un Canto Fúnebre Transilvano, con la curiosidad de que lo revirtió y fue interpretado al revés. El texto es una cita frase de San Juan, (Jn 13, 34) en la lengua rumana. "Jesús les dijo a sus discípulos: Un nuevo mandamiento os doy, Que os améis los unos a los otros". Curiosa la interpretación que le da Kubrick a esta cita en la película.
No hay comentarios:
Publicar un comentario